Podemos decir que Naná Vasconcelos ha sido, posiblemente, el percusionista más completo, más universal, pues no sólo atendía a la tradición sonora del hombre y los instrumentos que ha creado a lo largo de los siglos sino a los sonidos y ritmos de la naturaleza. Por eso le hemos llamado el percusionista amazónico, por su inmensidad, por su variedad, por su riqueza sonora y por la visión orgánica de su arte. Para él se puede hacer música con cualquier objeto o elemento que pueda vibrar, comenzando con su propio cuerpo, el primer instrumento. Según contaba, las raíces del ritmo y de la percusión estaban en África pero también en la naturaleza y en la tradición mimética de los indios que habitan el Amazonas. De esto último, como muestra, oiremos la canción "Tomarapeba" que se incluye en el disco “Duas Vozes”, grabado con Egberto Gismonti. En "O berimbau" podemos apreciar como elevó este - aparentemente simple y primitivo- artilugio a la categoría de instrumento solista de concierto. En "Batuque das aguas" vemos como, desde dentro del agua, hace del líquido elemento su tambor. Como artista total también hizo discos con canciones, como el exitoso "Minha Loa" del que escuchamos la deliciosa "Voz Nagô". Sus incursiones y devaneos con el jazz fueron muy fructíferos, pues añadió a este género el color, la temperatura, los ritmos y las texturas de la percusión brasileña. Escucharemos uno de los temas, "Ozark", del prodigioso disco "As Falls Wichita, so falls Wichita Falls" que grabara con Pat Metheny & Lyle Mays. También tendremos oportunidad de verle participar en grandes producciones del universo del rock de finales de los 90, como el magistral "O estrangeiro"de Caetano Veloso, el insinuante "Copy me", al lado de Arto Lindsay y sus Ambitious Lovers, y el enérgico "Perfect world" de The Talking Heads. Sus texturas sonoras permearon asimismo el blues, como acredita la versión en directo de "I got some help I don't need" de BB King, en el disco "Now appearing at Ole Miss". Y como despedida del maestro, su última grabación, un disco en formación de trío con Zeca Baleiro y Paulo Lepetit, titulado "Café no bule", del que hemos escogido "A dama do Chama-Maré". Él siempre decía que el Amazonas era una reserva de vida y de sabiduría, que él supo asimilar y transponer en música, para que pudiésemos vibrar al ritmo del universo. Escuchar audio
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