EL AHOGADO MAS HERMOSO DEL MUNDO:
La literatura fantástica ha sido ninguneada por reputados literatos y críticos de nuestro tiempo, tratada durante mucho tiempo de juego de niños y necios so? ?adores. Los mismos que idolatran el valor de la divina comedia, el peso de Fausto, de la Iliada o la Odisea... Los mismos que estudian esos textos en las facultades de literatura vomitan todavía hoy mezquinas palabras de odio sobre el relato y el escritor fantástico... Parecemos olvidar que en la fantasía y el mito nace la literatura, de las leyendas tradiciones mágicas surgió el poema de Gilgamesh y en esa confusión mística hemos dado sentido al universo, porque el elemento fantástico es una puerta a la realidad, una realidad invisible, que no puede verse ni tocarse, pero que se respira y se siente en el alma como una puñalada certera en el corazón, como un primer beso de primavera, como el primer trago de agua fresca tras cruzar el desierto... Así construye el maestro Gabo nuestro relato de esta noche, así dibuja un universo que se parece más a un pueblo, y en la fantasía desconcertante de su Ahogado aprendemos a mirarnos al espejo de las pericias y debilidades del hombre. Como diría el maestro Jorge Luis Borges. "la literatura es un sueño dirigido"... Pues soñemos amigos, reunámonos en torno al fuego Primigenio y escuchemos la historia de una pequeña villa marcada por la visita de un inesperado cadaver, soñemos y contemplemos juntos las maravillas del ahogado más hermoso del mundo.
LAS MOSCAS:
No es de extrañar que Horacio Quiroga sintiera el halo evocador que generan estas diminutas y molestas criaturas, capaces de oler la podredumbre a km de distancia, asociadas con frecuencia a la cercanía de la muerte y la tragedia. No en vano la vida del Maestro Quiroga cuenta con más muertes trágicas que una tragedia Griega. La muerte se hizo presente en su vida siendo muy joven, y dejó una huella indeleble que le acompañaría para los restos. Porque si existe el instinto de muerte, si ese instinto se contagia, Quiroga lo compartió con nuestras protagonistas de esta noche... El escritor urugayo Vivió la el fallecimiento de su madre, de su padre y su padrastro, de sus hermanos y amigos a edades tempranas en una combinación imposible de fatalidades e injusticias que impregnaron en buena parte de su obra el aroma de la parca. Es por eso que nuestro relato de esta noche tiene tantas cosas que decir al respecto de la muerte, una muerte alada, una muerte solitaria, una muerte dedicada a una de las criaturas más curiosas que esta pobre humanidad ha tenido la fortuna de contemplar, deleite del distraido, incordio del durmiente, sigan el zumbido lejano que ya se escucha agolpándose en algún oscuro rincón de su imaginería, y déjense llevar a través de la prosa hechizada por el genio de Quiroga, hasta el evocador universo de las moscas ...
Comentarios
Hermosa forma de narrar la primera historia.