«El terremoto de Lorca» 15/05/2011 - 1ª hora -

La nave del misterio se ha desplazado hasta Lorca (Murcia) para conocer de primera mano, las graves consecuencias de una de las tragedias más importantes de nuestro país en los últimos años. Nueve personas han fallecido como consecuencia de los enormes destrozos dejados por un terremoto que sorprendió a muchos habitantes en sus casas. La tierra rugía por primera vez a primera hora de la tarde, provocando los primeros daños y sustos. Sin embargo, lo que nadie se esperaba era una nueva repetición del seísmo, de mayor intensidad, que alertó a la mayor parte de la población.

El siguiente episodio de esta catástrofe se puede resumir en una ciudad totalmente sumida en el caos y miles de personas intentando huir del peligro de los edificios que se derrumbaban ante sus ojos. Poco después, llegaban los equipos de emergencias y en medio de la madrugada, las anteriormente concurridas calles de Lorca quedaban desalojadas, dejando una imagen poco habitual de ella

Un sexto sentido

Perros, gatos y aves parecían presagiar lo que iba a ocurrir. Muchos son los testimonios recogidos que confirman el extraño comportamiento de los animales de compañía de muchos lorquinos, minutos antes de la tragedia. ¿Acaso querían huir del epicentro?

Las profecías del terremoto

Curiosidad o no, esta misma semana, los periódicos nacionales e internacionales se hacían eco de la noticia sobre un experto italiano que había profetizado, antes de su muerte, un seísmo de gran magnitud en Roma. Raffaele Bendandi, que así se llamaba, había elaborado varios escritos bajo notario con las posibles fechas en las que se podrían producir terremotos en Italia y el resto del mundo. Casualmente, él había anunciado una cita concreta: el 11 de mayo de 2011. Sin embargo, el ya célebre astrónomo pudo haberse equivocado en sus cálculos. La fatalidad no tuvo lugar en la ciudad del Coliseo, sino en la región murciana afectada.

Un mal augurio

Por otro lado, hace tan sólo unos meses, tuvimos la oportunidad de conocer de primera mano las reacciones de los habitantes de Vera, ante la decapitación de la figura del Cristo situado en un cerro cercano a esta localidad almeriense. Muchos fueron entonces los que pensaron que una tragedia estaba próxima. No parecían estar muy equivocados. Incluso el geólogo Juan Antonio Segura, en nuestro programa, adelantaba que un seísmo podría producirse en aquella zona.