¡Muy buenos días a todos! Hoy vengo a hablaros de la deep web. La verdad es que tenia ganas de hacer un podcast así y creo que hemos de destacar muchas cosas de esta deep web. Por eso no quiero dejar nada aleatorio y explicarlo lo más profundamente (valga la redundancia) que pueda y poder explicároslo sin tecnicismo. Como siempre, claro, conciso, con ejemplos y para todo el mundo. Como ya sabréis. Pues bien, como siempre hago en todos los podcasts que hablo de anglicismos, vamos a definirlo. ¿Qué es la deep web? Pues la deep web es el internet profundo o la parte de internet totalmente anónima y que no es posible indexarla por ningún motor de búsqueda. Bueno, supongo que alguno de vosotros me dirá..Ferran, no entiendo nada de esto. Motores de búsqueda, indexado…me estoy perdiendo. Sin problema. Vamos paso por paso. Un motor de búsqueda es una página web que aglutina toda la información que se puede leer en internet. Por ejemplo, Bing o Google son motores de búsqueda. Webs capaces de leer todo internet y darnos el resultado cuando buscamos algo. Es decir, que son webs que se encargan de indexar, como si fuera un libro, todo el contenido. Pues bien, con la deep web, desde hace ya unos años, hemos podido ver que estos motores de búsqueda no son capaces de indexar todo el internet, sino que solo una pequeña parte. ¿Esta información de la deep web donde se almacena? Pues se almacena en servidores privados. En servidores que les sirven para poder dar su información de carácter totalmente privados. A las personas que ellos quieren. ¿Como lo hacen? Pues es muy sencillo de entender. Con un ejemplo. ¿Qué pasa si yo salgo de fiesta un día y quiero un ligue de una noche pero no quiero ver a esta persona nunca más? Pues que no le daré mi dirección ni mi número de teléfono, no? En cambio, si quiero que me encuentre, le daré mi dirección de correo electrónico, mi dirección de casa o incluso mi móvil. al final, se deja rastrear quien quiere. Se dice que el contenido de la deep web supera por 500 veces lo que somos capaces de ver en el internet superficial, es decir, en lo que Google o otro motor de búsqueda puede indexar. Digo se dice porque no hay manera de saberlo, ya que no está indexado en ninguna banda. Se sabe esta estimación ya que cuando se investiga algunas páginas del internet profundo, se puede constatar que hay miles y miles de documentos en ellas. Os preguntareis: ¿Pero porque una empresa tan grande y potente como Google no puede indexarlo? Pues la respuesta la puedo dividir en diferentes partes: – La dirección web: la página web cambia. Internet oculto o profundo es precisamente oculto por esto. Porque el contenido varia en sí mismo dependiendo de si se accede desde una parte o desde otra, o de las visitas que ha tenido anteriormente. No es estático. – El contenido está totalmente restringido a la gente. No se puede acceder si no es por contraseña o invitación. Es secreto – También puede ser porque el indexador, es decir, Google o Bing, no es capaz de guardar los datos. Normalmente los datos que guardan son en formato HTML, el lenguaje que tienen las páginas web para poderse interpretar por el navegador. Pero ¿qué pasa si el contenido no está creado en este lenguaje? – Lo más común y más raro, es que no existen enlaces a estas webs. Es decir, imaginad que cojo el ejemplo anterior de cuando salgo de fiesta. Imaginad que salgo solo, que no me relaciono. Que nadie sabe donde vivo. Nadie sabe de mi existencia y yo tampoco hablo. Al final, parezco un fantasma. Nadie sabe nada de mi. No pueden rastrearme ni nada, ya que no existo para nadie. Pues pasa lo mismo con Google. Si las webs no están enlazadas o nadie se hace eco de como llegar a ellas, ¿como Google podría ir? No puede. ¿Pues entonces, como funciona exactamente? Pues cada petición va a un nodo diferente (es decir, a un servidor diferente) y va saltando de nodo en nodo hasta llegar a la información concreta y después se la retorna a quien la ha pedido. Es un proceso lento y es por eso que la deep web es lenta por definición. Por eso no se ven muchas webs con imágenes, con códigos muy largos o páginas que son complejas para el internet superficial que estamos acostumbrados. Pues bien, después de hacer todo el podcast, voy a desmentir partes del podcast o a limar frases que he dicho muy categoricas. Algunos de vosotros me diréis ¿pero vaya, has mentido? No, para nada. Lo que pasa es que es mas fácil explicar todo de buenas a primeras y después matizar puntos concretos que no explicar todo de golpe con todas las excepciones y explicaciones. Creo que acabaría liando más que otra cosa. Pues bien, antes he dicho que el protocolo que se usa para la deep web es totalmente anónimo. Y si bien es algo así, el protocolo permite, de una manera muy rudimentaria, perseguir a través de lo que se llama los footprints, es decir, las huellas, por donde ha ido pasando la petición. De servidor en servidor, hasta llegar a la persona o al servidor final. Como digo, esto no es tarea fácil, en muchos casos no se puede hacer, y los casos que se pueden hacer, son casos muy aislados y que se necesitan grandes tecnologías y gente muy muy preparada. Sin ir más lejos, así atraparon a uno de los portales más famosos de la deep web. Este portal se llamaba Silk Road. Este portal era el mercadillo ilegal por excelencia. ¿Quieres un kilo de cocaína? ¿Quieres una ametralladora AK45? ¿Quieres un sicario? No hay problema. Todo se puede comprar. Era una plataforma como eBay, pero con productos ilegales. Absolutamente todo se valía. Se aprovechaba de la anonimidad de la deep web y de los pagos Bitcoins, haciendo así que la detección del comprador y del vendedor fuera totalmente anónima y casi imposible de detectar. Pues para ser la plataforma más conocida de la deep web, había generado un tráfico de más de $1.200 millones de venta de productos. Para el bolsillo del creador, fueron $80 millones. La verdad, una obra de arte a nivel tecnológico. Pues bien, la historia de como desmontaron toda la estructura fue si más no, divertida. Todo empezó con que la DEA y el FBI, hartos de no poder llegar a rastrear todo el complejo sistema de Silk Road, empezó a averiguar sus inicios. Empezaron a hacer una búsqueda de su pasado. Entonces, fue allí donde el creador dejó algunos rincones donde se podía averiguar que era él quien estaba detrás. Mediante Bitcoin, se puede averiguar quien está delante y detrás de la transacción, es decir, quien paga y quien recibe el pago. Pero en ningún caso lo podían rastrear, ya que Ross, el creador, encriptaba los pagos a través de complejas transacciones falsas, haciendo así muy difícil averiguar qué transacciones eran las falsas o las verdaderas. A parte, el sistema que usaba la gente para acceder era el llamado Tor. Tor viene de las siglas The Onion Router. Es decir, El router cebolla. Se llama así porque la estructura de comunicaciones funciona como una cebolla precisamente. Es un protocolo de encriptación en la cual garantiza el anonimato de los usuarios y la comunicación encriptando varias veces la información. Desde la dirección de la petición hasta el contenido. Todo. Todo es aleatorio. Ya que cada información pasa de un nodo a otro y esto produce que la encriptación sea absoluta, haciendo que se escojan los nodos aleatoriamente y no se sepa de donde viene. Pues bien, lo que hicieron las autoridades americanas es ver donde habia estado las primeras pistas o evidencias de la existencia de Silk Road en toda su historia. Fue entonces donde apareció en varios portales WordPress y en varias charlas donde se había hecho una serie de preguntas o referencias y empezaron a estirar del hilo hasta llegar a alguien que preguntaba algo referente al bitcoin y de su encriptación y todo lo asociaban a un correo electrónico de Gmail. Este correo, a través de una orden judicial, fue el que detonó el nombre y apellidos de la persona que estaba detrás. La empresa de Gmail, Google, tuvo que darles todos los datos para que pudieran desvelar quien estaba detrás de todo este portal. Y así fue. Por un simple descuido del autor en los inicios del proyecto. Entonces, realmente es anónimo la deep web? En la mayoría de los casos si, por su sistema, pero no quedas exento de nada. Ni la persona que más predijo su total anonimato y el de sus clientes, pudo escapar a la información que se deja en internet. Cabe decir que últimamente hay el rumor que hay un grupo de investigadores de seguridad informática que ha podido identificar a las personas que están detrás de la red TOR. Lo hace aprovechándose de la plataforma Firefox, la cual te permite conectarte a Tor para poderte navegar. Al final, son los descuidos que se hacen fuera de Tor los que te descubren de tu anonimato. Así que si usáis la deep web (o tor) y queréis ser totalmente anónimos, serlo no solo en tor y empezad por fuera de la deep web. Pues muy bien, si os ha surgido alguna duda de este tema tan apasionante o queréis contactar conmigo, recordad que podéis hacerlo a través del formulario de contacto. A parte, si podéis, suscribiros al canal y darme un me gusta en iVoox y 5 estrellas en iTunes! ¡Muchas gracias a todos! ¡Hasta mañana! La entrada 73. Deep web aparece primero en Ferran P..
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Me parecio muy interesnate este podcast!